Venezuela aceptó la invitación del presidente de Colombia, Gustavo Petro, para ser garante de los diálogos de paz que busca retomar con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN). En una carta enviada al presidente Nicolás Maduro, su par colombiano destacaba que «el gobierno y el pueblo de Venezuela siempre han brindado su apoyo eficaz para la superación definitiva del conflicto armado colombiano». El presidente de Colombia reactivó las negociaciones con el ELN, interrumpidas en 2019 por el gobierno de Iván Duque, después de un ataque contra una escuela policial que dejó 22 muertos. Delegados del Ejecutivo colombiano ya se reunieron en La Habana con representantes de esa guerrilla.
«Venezuela apuesta por la paz»
«Recibimos una carta proponiendo que Venezuela acepte el carácter de garante de las negociaciones y de los acuerdos de paz del gobierno con la guerrilla del ELN, y yo le dije a Petro y a Colombia que una vez más, como lo hizo (Hugo) Chávez en su tiempo para garantizar los acuerdos de paz que luego se firmaron, una vez más decimos que Venezuela acepta; pondremos nuestra mejor voluntad en nombre de Dios padre todo poderoso por la paz total de Colombia», reveló Maduro.
El presidente venezolano, que habló en un acto de gobierno en la ciudad de Valencia, dijo que su país llevará a esas gestiones «la voz de todo el pueblo de Venezuela y de los seis millones 200 mil colombianos que viven en Venezuela». A continuación remarcó que «Venezuela apuesta por la paz, por la seguridad, por la estabilidad de Colombia; la paz de Colombia es la paz de Venezuela, de Sudamérica, de todo el continente; empeñaremos todo nuestro esfuerzo, todo nuestro trabajo».
Venezuela ya fue garante de un proceso de paz en el 2016, cuando acompañó la primera fase de las conversaciones con el ELN en Quito, junto a Noruega y Cuba, aunque esa etapa después quedó en la nada. Se había firmado entonces que el retorno de la delegación del ELN se haría a través de territorio venezolano. Incluso desde antes de su asunción, Petro hizo público que buscaría conversar con el ELN y hace semanas envió al Congreso un plan que llamó de «paz total» para iniciar negociaciones con varios grupos ilegales.
«Hechos y no sólo palabras»
El ELN se mostró dispuesto a discutir un proyecto para dejar las armas, aunque mostró algunas diferencias con el proceso que encararon hace años las FARC y que terminaron con el acuerdo de 2016, por el que esa guerrilla se convirtió en un partido político legal con bancas en el Congreso. El ELN necesita «hechos y no sólo palabras», señaló días atrás el jefe negociador de la insurgencia, Pablo Beltrán, quien marcó sus dudas respecto a un eventual desarme: «Las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) entregaron las armas y comenzaron a matarlos».
Desde que asumió el siete de agosto, Petro se puso como objetivo alcanzar la paz con la guerrilla. El 11 de agosto, en Cuba, el gobierno empezó a explorar la posibilidad de establecer un diálogo con el ELN. En ese mismo país se llevaron adelante las conversaciones que culminaron en un acuerdo entre el gobierno y las FARC en 2016.
Los gobiernos de Chile y España se ofrecieron para ayudar en este diálogo. Y para favorecer las negociaciones el presidente colombiano suspendió por tres meses, en principio, las órdenes de captura de los principales jefes de los grupos armados que decidieran someterse a un proceso de paz.
Una nueva era
Desde la asunción de Petro el pasado siete de agosto, Bogotá y Caracas iniciaron un firme proceso de acercamientos: designaron embajadores, reunieron a comisiones técnicas y acaban de anunciar la reapertura de las fronteras. Este martes el embajador colombiano en Caracas, Armando Benedetti, dijo que Colombia y Venezuela reanudarán los vuelos comerciales a partir del 26 de septiembre.
«Cielos abiertos entre Venezuela y Colombia para acelerar la normalización de los vuelos», aseguró Benedetti en torno a la reactivación de los viajes suspendidos desde marzo de 2020 en medio de la pandemia de covid-19. La reactivación de los vuelos coincide con la reapertura de la frontera, lo que se concretará también el próximo 26 de septiembre cuando, luego de siete años, se permitirá nuevamente el paso binacional de vehículos.
No fueron estos los únicos gestos de aproximación entre ambos países en las últimas horas. El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Álvaro Leyva, dijo que el país buscará retirar la demanda interpuesta, durante la gestión de Duque, contra el presidente Maduro ante la Corte Penal Internacional (CPI). En declaraciones a W Radio, Leyva afirmó que sería partidario de retirar esta denuncia para restablecer relaciones con el país vecino.
«Dentro de la normalización hay que revisar una iniciativa que se tomaron en otros gobiernos, en otros momentos y otras perspectivas, de tal manera que no me sorprendería que, en su momento, con la claridad necesaria sobre muchos aspectos que se están solucionando, se llegue a la necesidad de retirarla», dijo Leyva al respecto. Para el canciller colombiano lo que se hizo con Venezuela «fue una barbaridad», teniendo en cuenta que «en todos los países del mundo en conflicto nunca se negó la existencia de un Estado».
Colombia y Venezuela comparten una extensa frontera terrestre de 2.219 kilómetros, una relación histórica, cultural y comercial y unas relaciones diplomáticas que datan del 27 de noviembre de 1831.
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/482102-maduro-acepto-la-propuesta-de-petro-y-venezuela-sera-garante