La caída de la imagen de Lula continúa. La última encuesta publicada por la consultora Genial/Quaest refuerza la serie de malas noticias sobre la evaluación del gobierno y la proyección de Lula para las elecciones presidenciales de 2026.

 La encuesta se enfoca en ocho estados incluidos dos del Nordeste – Bahía y Pernambuco – donde las consideraciones negativas aumentan y las positivas disminuyen. Estos dos estados, de hecho, son los únicos en los que el presidente aparece por delante de Jair Bolsonaro en la carrera presidencial, aunque está inhabilitado hasta 2030.

La última encuesta de este tamaño, a finales de enero, había mostrado que la evaluación negativa del gobierno superó a la positiva por primera vez en la serie histórica. Ahora, en San Pablo, por ejemplo, Lula obtuvo un 55% de evaluaciones negativas contra sólo un 16% de positivas y un 27% en promedio, con un 2% que no supo o no quiso responder. 

Una situación similar se encuentra en los estados de Río de Janeiro y Minas Gerais. En Minas Gerais, estado clave para la victoria del candidato de Lula en 2022, el 51% tiene una opinión negativa del actual gobierno federal, frente al 22% con opinión positiva y el 25% en promedio. 

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Los mayores números de desaprobación de la gestión del presidente están en Paraná y Goiás, con 59% y 58%, respectivamente. La valoración positiva más alta la tiene Pernambuco, con 33%, seguido de Bahía, con 30%. En el caso del primero, la cifra todavía está dentro del margen de error respecto a las opiniones negativas, que se sitúan en el 37%. En el segundo, hay un 38% de opiniones negativas, por encima de las positivas. 

En San Pablo, por ejemplo, Lula obtuvo un 55% de evaluaciones negativas contra sólo un 16% de positivas y un 27% en promedio, con un 2% que no supo o no quiso responder.

Los escenarios explorados para las elecciones presidenciales de 2026 tampoco parecen alentadores para el candidato del PT. Frente a Bolsonaro, en un hipotético escenario de segunda vuelta por inelegibilidad, Lula sólo tiene ventaja en los dos estados del Nordeste. 

En São Paulo, el expresidente lidera con el 45% de los votos, frente al 36% del actual presidente. En Goiás, la diferencia es aún mayor, con 50% a 30%, así como en Paraná, con 51% a 30% a favor del ex jefe del Ejecutivo. Hay empates técnicos en Minas Gerais (42% para Bolsonaro contra 40% de Lula) y en Río (ambos con 41%), y una ligera ventaja de Bolsonaro en Rio Grande do Sul (44% contra 38%). 

Contra Tarcísio de Freitas (Republicanos), el escenario más probable dada la inelegibilidad de Bolsonaro, la situación es similar: Lula pierde en São Paulo, Goiás y Paraná, gana en Bahía y Pernambuco y técnicamente empata en Minas, Río de Janeiro y Rio Grande do Sul. 

Según Quaest, el rechazo a Lula dificulta su eventual candidatura en algunos estados. En São Paulo, Lula es rechazado por el 66% de los votantes. Un número similar se encuentra en Minas (62%), Paraná (68%) y Río (58%). 

Según Quaest, el rechazo a Lula dificulta su eventual candidatura en algunos estados. En São Paulo, Lula es rechazado por el 66% de los votantes. Un número similar se encuentra en Minas (62%), Paraná (68%) y Río (58%).

Bahía y Pernambuco siguen siendo los dos estados encuestados donde el presidente todavía tiene buenos números: el 59% y el 58% de los electores, respectivamente, dicen conocerlo y votarían por él. 

Fuentes del entorno de Lula consultadas por LPO reconocen el nerviosismo por lo que muestran las encuestas pero afirman que hay margen para recuperarse. Por eso, el gobierno vine anunciando a cuenta gotas cambios en el gabinete. 

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El primero fue en el área de comunicación con Sidonio Palmeira para relanzar la estrategia en la imagen, como reveló en exclusivo LPO. El último es en Salud que acaban de anunciar a Alexander Padilha, quien deja vacante ese lugar clave en la relación con el Congreso y los partidos políticos.

“Es una situación complicada que nos genera más preguntas que respuestas. La llave para salir de esto es tranquilizar la economía y bajar la inflación. Con eso resuelto, vamos a estar bien”, afirma a LPO una fuente más escéptica.

Fuente: LaPoliticaOnLine.com