Rodrigo de Paul, una de las figuras de la selección argentina campeona en el Mundial, está de festejo. No solo por el triunfo en Qatar -alegría popular que sigue presente en el país- sino también al cumplirse 10 años de su debut como futbolista profesional, en un partido de Racing contra Arsenal de Sarandí. El futbolista compartió la efeméride en redes sociales, una publicación que cosechó más de 700.000 me gusta. Una de las pocas voces en contra de su posteo -que incluyó una carta de puño y letra- fue la de Fernando Iglesias, el diputado troll que tanto pregona Mauricio Macri. Su rechazo de este hincha de Independiente no fue por la rivalidad de los equipos de Avellaneda ni tampoco por las noticias de la vida privada de De Paul que sobrevolaron los programas de chimentos, sino porque el jugador de fútbol dijo «defender» al país, al usar la camiseta de la Selección.

El profesor de vóley devenido en diputado se hizo eco de la noticia de Página/12 y llamó al mediocampista «descerebrado». Es que para el legislador antiperonista el hecho de que De Paul exhiba su compromiso con el seleccionado masculino de fútbol -a partir de la frase «defender a mi país»- es un «nacionalismo berreta». Iglesias, además, dijo estar en contra «del uso de lenguaje épico en casi cualquier circunstancia» y estar «podrido del síndrome de la patria está en peligro».

Nada, dijo, en cambio, de los continuos slogans y comunicados de su partido político -el último ejemplo, bien frescrito, fue usar la denominación «bomba» para sembrar caos financiero antes de la asunción de un nuevo gobierno- ni tampoco de que ese supuesto síndrome es uno de los latigillos favoritos de Patricia Bullrich para publicar sus recorridas.

Y si la intención es rechazar el lenguaje e ideología bélica, cuesta entender también los retuits del propio Iglesias.

La reacción en redes

Al igual la publicación de De Paul, los ataques de Iglesias también tuvieron miles de respuestas en redes sociales. Estas fueron algunas de ellas:

Fuente: https://www.pagina12.com.ar/523336-los-ataques-trolls-de-fernando-iglesias-no-se-toman-dias-de-