El debate de la Ley Bases en la Cámara de Diputados -que finalmente terminó con media sanción, con 142 votos a favor, 106 en contra y 5 abstenciones- no solo fue maratónico, con casi 30 horas de duración, sino que también estuvo repleto de chicanas.
Una de ellas estuvo protagonizada por Rodolfo Tailhade, diputado de Unión por la Patria por la provincia de Buenos Aires, quien en un juego de palabras definió al proyecto de Javier Milei como «Ley pasta base».
La sesión también estuvo marcada por los gritos entre la diputada del Frente de Izquierda por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Myriam Bregman, y el titular de la cámara, Martín Menem.
«Diputada, usted no se anotó para opinar sobre este artículo», dijo el libertario interrumpiendo el discurso de la legisladora. «No me puede interrumpir. Acá no hay una dictadura civil, me tiene que dejar terminar», respondió a los gritos la diputada.
«Sí la puedo interrumpir porque está incumpliendo el reglamento», le retrucó, también a los gritos, Menem. Y siguió, luego de silenciarle el micrófono a Bregman: «¿Usted mandó de qué capítulo iba a hablar? Acá no mandó nada, usted es víctima de lo que decidió en base a lo que hemos hecho todos. No figura en el listado».
Otro momento que generó risas y tensiones entre los diputados y diputadas fue el irónico saludo que Germán Martínez, jefe de bloque de Unión por la Patria, le dedicó al director de YPF y vicejefe de Gabinete, José Rolandi. «Rolandi, director de YPF. Por cinco te aumentaste…», dijo el legislador de Santa Fe con una sonrisa burlona, mirando a los palcos, donde el funcionario estaba sentado junto al ministro del Interior, Guillermo Francos.
«Diputado, se está saliendo del 159. Vamos al grano. En serio, Germán», lo frenó Menem. «No se puede ser cortés…», respondió Martínez. Y Menem insistió: «Por favor diputado, no chicanee, vamos a jugar un juego limpio, cumplamos el reglamento, cuestiones ajenas no van». Martínez no dejó pasar la oportunidad: «No hay problema, no vamos a decir que se aumentó el sueldo por cinco. Reorganización administrativa: 70 palitos», remató.
Horas antes, Martínez también se había cruzado con el diputado del PRO por la Provincia de Buenos Aires Gerardo Milman, quien dedicó minutos de su intervención en el recinto a citar a distintos filósofos y pensadores de la historia, haciendo énfasis en el concepto «libertad», y hasta se declaró «kantiano», en referencia a las ideas del alemán Immanuel Kant.
Al finalizar, debía tomar la palabra a Roxana Monzón, diputada de Unión por la Patria por la Provincia de Buenos Aires, pero Martínez pidió hacer una interrupción. «Esperaba muchas cosas del diputado pero no que se manifieste kantiano», señaló el jefe de bloque, al recordar que en su «Imperativo Categórico» Kant decía que «había que obrar de tal manera que la propia acción pueda transformarse en una máxima universal».
«Lo que usted hizo con Cristina Fernández de Kirchner no se puede transformar en ninguna máxima universal», planteó Martínez, en referencia a las pistas que señalan una posible vinculación de Milman con el intento de magnicidio que la expresidenta sufrió el 1 de septiembre de 2022.
Más tarde, cuando tuvo acceso nuevamente al micrófono, Milman levantó el guante. «Si bien no se me nombró, he sido aludido obviamente por el diputado por Santa Fe, adjudicándome un hecho que no existe en la Justicia. Una de las cuestiones de la libertad es la división de poderes, tiene la facultad de hacer leyes», dijo el diputado del PRO.
En ese sentido, recordó que «la Justicia es la que determina la inocencia o la culpabilidad de las personas» y que «nuestro derecho sostiene el principio de la inocencia como principio fundamental de nuestra convivencia», aunque no aclaró por qué puso tantos reparos para que la justicia tenga acceso a su celular.
«Si el diputado de Santa Fe tiene alguna prueba, que vaya y denuncie en el expediente. No tengo ninguna denuncia, porque menos estoy imputado, porque mucho menos estoy procesado, ni hablar de estar condenado», lanzó. Y concluyó: «todas las pruebas llevadas adelante en el expediente, aún sin ninguna de estas categorías, dieron negativas y dieron favorables a mi persona».
La Ley Bases en redes sociales
Las chicanas también tuvieron su capítulo en redes sociales. Marcela Pagano, la diputada de LLA que venía de sufrir una internación por las presiones sufridas para renunciar a la presidencia de la comisión de Juicio Político, publicó en Twitter, luego de las críticas recibidas por estar ausente en el Congreso (recién se acercó para el momento de la votación): «A la gilada (y a las pavas) ni cabida».
«Por lo único que interrumpí la licencia es para apoyar a mi presidente Javier Milei que necesita esta ley como punto de partido para llevar adelante la modernización de nuestra Nación. Gracias por los mensajitos lindos y gracias por el respeto (lo hago en nombre de mi familia) a la privacidad de mi salud. Estoy mejor, es un proceso lento y requiere paciencia. Gracias», agregó.
En las redes también generó sorpresa la opinión de Pablo Avelluto, exministro de Cultura del macrismo. «Mi respeto a los diputados que dijeron que no es no. Son de Unión por la Patria y el Fit más Natalia de la Sota y los socialistas Mónica Fein y Esteban Paulon. Más allá de las diferencias que tuvimos y podamos tener, apoyo su rechazo. Las convicciones democráticas, primero«, publicó el exfuncionario, quien desde hace meses viene expresando que Milei supone «un límite para la democracia».
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/733081-las-perlitas-del-debate-por-la-ley-bases