Donald Trump y Emmanuel Macron se reunieron en Washington para debatir la estrategia que ponga fin a la guerra en Ucrania. Ambos no ocultaron sus diferencias pero se comprometieron al envío de fuerzas de paz europeas. 

Macron fue recibido en el despacho oval de la Casa Blanca, prometió negociaciones  para una paz “duradera” y espera una “fuerte” implicación estadounidense para conseguirlo.

Por su parte, Donald Trump se jactó ante los periodistas de su relación “especial” con Macron y aseguró que podría poner fin a las hostilidades bélicas en “unas semanas”.

El presidente estadounidense consideró también que la firma de un acuerdo con Ucrania para tener acceso a los minerales de este país está “muy cerca” y mencionó la posibilidad de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, venga a la Casa Blanca para ratificarlo “esta semana o la próxima”.

Trump ignora a Europa y acuerda con Putin negociar el fin de la guerra en Ucrania

Para él es una forma de que Estados Unidos recupere la millonaria asistencia desembolsada para ayudar a Kiev desde la invasión rusa de febrero de 2022.

El presidente estadounidense consideró también que la firma de un acuerdo con Ucrania para tener acceso a los minerales de este país está “muy cerca” y mencionó la posibilidad de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, venga a la Casa Blanca para ratificarlo “esta semana o la próxima

El republicano, que cuenta sobre todo con su diálogo con el presidente ruso, Vladimir Putin, para detener los combates, afirmó también que este último aceptaría un despliegue de tropas europeas en Ucrania, pero respondió con evasivas cuando se le preguntó si Washington ofrecería garantías de seguridad a estos soldados.

“Los europeos están dispuestos a llegar hasta el envío de tropas” a Ucrania para verificar que “se respete la paz”, afirmó Emmanuel Macron. Y añadió que Europa está dispuesta a “reforzar” su defensa. 

Los europeos están dispuestos a llegar hasta el envío de tropas” a Ucrania para verificar que “se respete la paz

Ambos dirigentes intercambiaron algunas bromas y cumplidos, en un tono bastante distendido. También se dieron fuertes apretones de manos, lo que se ha convertido en una especie de sello distintivo de su relación, como ya hacían durante el primer mandato de Donald Trump.

Delante de Trump, el presidente francés calificó a Rusia de “agresor”. El magnate republicano insiste, por el contrario, en poner a ambos países al mismo nivel, cuando no responsabiliza a Volodimir Zelenski, como hizo recientemente.

Fuente: LaPoliticaOnLine.com