Israel, Qatar, Estados Unidos y Egipto confirmaron el acuerdo con Hamas que establece el alto al fuego en la Franja de Gaza y la liberación de rehenes cautivos desde el ataque terrorista del 7 de octubre de 2023.
El encargado de anunciarlo fue, el primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman, al Thani, que detalló que el acuerdo entrará en vigor el domingo 19 de enero e incluye el intercambio de rehenes por prisioneros palestinos. La primera fase durará 42 días e incluirá un alto al fuego y la retirada de las fuerzas israelíes hacia el este, lejos de las zonas pobladas.
Uno de los puntos clave en la negociación fue lo que respecta a la retirada de las tropas israelíes y su presencia en el corredor de Filadelfia. Israel entregó a Hamás los mapas y plazos de retirada de tropas de la Franja de Gaza, algo que la organización islamista demandaba denunciando la ambigüedad del planteamiento anterior del Ejército, que sólo anunciaba que los soldados abandonarían zonas pobladas.
Las partes habrían acordado la progresiva retirada de las tropas israelíes de la ciudad sureña de Rafah, fronteriza con Egipto, en la primera fase. En la segunda y tercera Israel y Hamás negociarían la salida de las tropas del corredor de Filadelfia.
Israel y Hamas negocian la liberación de 33 rehenes y un alto al fuego en Gaza
El ministro de Exteriores israelí, Guideon Saar, dijo este miércoles que el pacto del alto el fuego con Hamás, “es un acuerdo doloroso”, porque Israel tendrá que soltar “a terroristas y asesinos peligrosos” a cambio de la liberación de los rehenes israelíes que siguen en Gaza.
“Es un acuerdo muy difícil, doloroso, pero es muy importante para nosotros que nuestros hombres, nuestra gente, sea liberada del cautiverio”, declaró Saar en una entrevista con la cadena pública de televisión italiana Rai.
Uno de los primeros en reaccionar fue el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien saludó el acuerdo de liberación de rehenes y alto el fuego entre Israel y Hamás, acordado apenas cinco días antes de que él regrese al poder.
“Tenemos un acuerdo para los rehenes en Oriente Próximo. Serán liberados en breve. ¡Gracias!”, dijo Trump en su red social Truth, antes de que hubiera un anuncio oficial de la Casa Blanca del presidente saliente, Joe Biden .
El especialista en Medio Oriente, Kevin Ary Levin, dijo a LPO que “yo diría que es una claudicación de Netanyahu, básicamente porque acordó a términos que anunció públicamente que no iba a aceptar, sobre todo la retirada israelí del corredor de Filadelfia, donde dijo que Israel necesitaba una presencia permanente para garantizar su seguridad, y también porque esto le trae muchos problemas dentro de su coalición de gobierno”.

Mohamed bin Abdulrahman, primer ministro de Qatar.
Por su parte, el periodista Ezequiel Kopel no cree que sea una capitulación del líder israelí y plante que “hubo una presión muy fuerte de Trump a Netanyahu, que incluyó mandarle a su enviado el día del descanso judío para presionarlo muy fuerte. Algunos sostiene que Trump amenazó como cancelar algún tipo de ayuda a Israel. A mí me parece que hubo una especie de arreglo entre ellos. Todo el tema de Gaza resintió la campaña de alguna manera de Biden. El arreglo es algo parecido a lo que pasó en 1981 con la llegada de Reagan al poder y la liberación de los estadounidenses en Irán”.
Para Ara Levin “evidentemente hubo una sorpresa, que en este mismo momento la derecha israelí, los sectores que están identificados con el gobierno, están lidiando de dos formas diferentes. Unos diciendo que Netanyahu claudicó, renunció a principios básicos con la seguridad, y otros diciendo que es rehén de un Trump que prometió apoyar a Israel y que ahora está utilizando otros intereses como la relación con Qatar y algunos otros actores del mundo árabe”.
Kopel remarca que “el rol de Egipto es, fue y será clave. Egipto es parte interesada, siempre tiene miedo que lo que pasa en la franja termine estabilizando el Sinaí egipcio. Y me parece que hay una distancia enorme de la retórica, de solidaridad con las acciones de Egipto hacia Gaza”.
“Qatar me parece que está un poco tratando de limpiar su imagen, aparte de ser parte interesada en el rol de alguna manera de interlocutor casi principal de Estados Unidos en la región, es decir, va a tener la compensación de Biden como tiene la del futuro presidente Trump. Qatar ha sido un Estado que ha apuntalado a Hamás monetariamente, le ha dado a cobijo a sus líderes y juega este juego en vivo”, añadió.
En coincidencia, Levin afirmó que “Qatar tenía un interés bastante claro en ejercer como mediador. Es uno de los principales sustentos y fuentes de ingreso de Hamas en los últimos años. Es un país que también viene jugando con cierta independencia que otros países no tienen, teniendo por ejemplo una base militares estadounidense en su territorio, pero también por momentos relaciones positivas con Irán”.
“Los qataríes vienen invirtiendo fuertemente para el orden regional entre Arabia Saudita e Irán y los respectivos aliados de cada uno. También permite a Qatar seguir usando su poder de alguna forma de apalancamiento, su relación dominante sobre Hamas, que sería imposible si Hamas continúa con su degradación y aislamiento internacional”, destacó.
Sobre Egipto, Ary Levin señaló que “tiene pretensiones históricas de liderazgo dentro del mundo árabe pero también tiene relaciones diplomáticas, una paz fría con Israel y sabe también que la presión que se puede ejercer sobre Egipto mismo por ejemplo para abrir la frontera de repente queda aliviada ante un acuerdo de paz. Va a ser necesariamente un punto de transición y una fuente también de todo lo que implique un proyecto de reconstrucción de Gaza que se implementaría en las fases 2 y 3 del acuerdo”.

Otro punto de análisis es el factor local y las presiones que tiene Netanhayu como líder de una coalición bastante compleja de sostenerse. Ary Levin considera “Netanyahu también puede haber hecho el calculo de que su gobierno está por caer está con muchas dificultades para aprobar un presupuesto y con cuestiones internas, y tal vez vean esto un salvavidas o una forma de caer como una causa que es popular para la mayoría de los israelíes, encuestas recientes muestran que 74% de los israelíes apoyaban un cese fuego más o menos en los términos en los que fueron anunciados o sabe que hacer explotar su coalición y rearmarla con miembros de la oposición, que es lo que se está discutiendo hoy en día, es la única forma de continuidad que tiene”.
“Si esto último pasa, puede es una jugada maestra en la cual Netanyahu e Israel salen de un berenjenal bastante difícil en la guerra, porque era imposible cumplir con las mismas condiciones que el gobierno se le iba impuesto para un cese al fuego”, agregó.
La CPI emite orden de detención contra Netanyahu por crímenes de guerra
En este punto, Ezequiel Kopel detalló que “hay dos líneas de pensamiento. Una línea que dice que la composición del gobierno de Netanyahu hace imposible que la tregua se mantenga porque se desarmaría. Y Netanyahu lo que más quiere es mantener el poder, e incluso gran parte de sus acciones, luego el hito de octubre, ha sido para garantizar su supervivencia política”.
“Después hay otra línea de pensamiento que dice es que el acuerdo va a fracasar en su segunda parte, que es cuando Israel tiene que retirarse de Gaza, y a la vez recibiría los presos soldados, hombres, o edad de soldado. La segunda línea de pensamiento es que Netanhayu sabe que también la permanencia en Gaza tarde o temprano no le garantiza tampoco nada le puede llegar a traer más problemas que soluciones”, finalizó.
Fuente: LaPoliticaOnLine.com